Todo/as mis clientes vienen con "sus propios mapas"; alguno/as tratan de utilizarlo pero no acaban de encontrar el camino o situarse en el; otros tienen un mapa que por no cuidarlo, las "arrugas" hacen que mas que un mapa parezca un "laberinto"; otros todavía están buscando la utilidad del mapa, "esperando encontrar el secreto de la vida" como si de un "mapa del tesoro" se tratara; y finalmente, algunos ya se han perdido y cansados de dar vueltas, han decidido ir por la vida "sin mapa".
Es por ello que hoy os voy a hablar de la importancia de entender y comprender el concepto que reza como título de este post.
A lo largo de la vida cada uno/a se va nutriendo de la información que conforma su propia forma de ver y entender el mundo (ver aquí post sobre teoría comportamiento R. Dills), es decir configurar su "propio mapa" ; de esta manera se le va dando forma para conseguir situarse y avanzar en un mundo que, como en cualquier mapa, tiene sus buenos "caminos" pero también, sus obstáculos, retos y adversidades.
El objetivo de cada uno es situarse en "el terreno de juego", lo que en PNL llamamos "el mapa" y de donde extraemos la diferencia entre el "mapa" de cada persona y el "territorio", el cual comprende una dimensión más amplia que la propia construcción del mapa. Es cuando decimos que "el mapa no es el territorio" pues cada uno lo ha diseñado según su constructo, para entenderlo y poder transitar con la mayor seguridad en su vida.
Ahora bien, permíteme que te haga la siguiente pregunta:
¿Te está siendo útil actualmente tu mapa?
Primero me gustaría recordar que todos formamos parte de la naturaleza, y que sin duda sabemos que es cambiante; constantemente aparecen y desaparecen elementos que generan nuevos espacios o limitan los mismos. (tenemos un ejemplo muy reciente en el cambio en la orografía de la isla de la Palma antes y después de la erupción del volcán).
Es por ello que en nuestro mapa debemos ir atendiendo a los "cambios orográficos" que se producen, e ir modificándolos para que sean de valor y utilidad; debemos verificar constantemente la información de nuestro mapa y nuestra posición para que sea útil (creencias, distorsiones, sesgos, buenas o malas experiencias, etc..).
¿QUÉ NECESITO PARA PODER IR DÁNDOLE FORMA AL MAPA?
Sin duda, "escuchar qué nos está diciendo la vida" y para ello debemos hacer una reflexión muy honesta; analizar si tenemos claridad en nuestra posición, si estamos yendo en la dirección a la que nos queremos dirigir y qué nos dicen aquellos con los que nos encontramos, es decir, aquellos con los que nos relacionamos en la vida, familia, amigo/as, compañero/as de trabajo, etc..; escuchar que nos cuentan de sus aventuras, caminos y experiencias y recoger esos recursos que nos podrán ser de utilidad para el destino al que queremos ir.
Si levantas la mirada y dejas de preocuparte por no entender tu mapa, empiezas a ver qué tienes a tu alrededor, qué recursos necesitas y qué te pueden aportar, empezarás a ver un camino lleno de oportunidades y retos en lugar de problemas; si haces esa reflexión necesaria y eres honesto/a contigo mismo/a, posiblemente verás que estás siendo tu principal obstáculo, pues te estás preocupando de entender un mapa al que le faltan datos en lugar de ocuparte por recopilarlos, y si no amplías la información, tendrás muchas dificultades para completar tu camino.
Así pues te invito a que busques y hagas útil tu mapa, estés abierto a los cambios en el mismo como fuente de información y Aprendizaje, y busques en los demás, aquellos recursos que te puedan ser de utilidad para completar y confeccionar, tu mapa de la vida.
Gracias y en el siguiente post te contaré, ¡cómo debemos afrontar el camino!
Como siempre espero aportarte valor y recursos, y en este caso "cojas los prismáticos" y recabes la información que haga útil tu mapa en "la aventura de la vida".
Bring it on!
Ignasi-Ranger